Este trimestre en la asignatura de Science, las alumnas de 1º de ESO están estudiando la atmósfera y dentro del contenido de esta, se explican las capas de la atmósfera, siendo una de ellas la estratosfera.

Para contarnos su aventura en la estratosfera, tuvimos la suerte de contar con el empresario riojano D. RAMÓN MADORRÁN, propietario de “Ramón Óptica”, padre de Elena y Elisa, antiguas alumnas de Alcaste; y abuelo, de Mara Pina.

Ha vivido muchas experiencias: ha volado en globo sobre Kenia, se ha tirado en parapente, ha montado en avioneta…, pero esto no es todo… disfrutó del viaje más insólito de su biografía: un avión MIG 29 ruso le dio un paseo de 45 minutos por la estratosfera. El piloto lo recogió en la base de Nizhni Novgorod, a 400 kilómetros de Moscú, despegó, durante cinco o seis minutos marcharon tranquilamente, pero luego puso el aparato en vertical, encendió los motores a tope y subió de repente a más de 25 kilómetros de altura.

D. Ramón quedó maravillado: «Veía la circunferencia de la Tierra mientras el MIG la bordeaba y me pareció un planeta blanco, reluciente, con zonas muy brillantes… No sé, quizá fueran los polos o quizá no, porque nadie me lo explicó, pero la imagen era espectacular, hermosa… No puedo explicarlo».

Después de unos minutos girando apaciblemente en torno al planeta, un descenso en picado. Se vio lanzado en vertical, entrando en la atmósfera y cruzando las nubes. “Fue sensacional. Son experiencias que no se pueden narrar».

Hace unos cinco años una empresa de Optica le ofreció esta posibilidad, como resolución de un concurso publicitario, y finalmente accedió. Se trasladó con una de sus hijas hasta Rusia, a una estación militar, con fuertes medidas de seguridad.

D. Ramón compartió con nosotras esta experiencia única, de la que sólo unas pocas y privilegiadas personas civiles en todo el mundo pueden realizar.

Las alumnas de 1º de ESO, y entre ellas su nieta Mara, siguieron con gran interés las explicaciones, que se apoyaban en la proyección de un vídeo, de dicha experiencia.

Finalizada esta apasionante explicación, las alumnas le formularon distintas preguntas, que atendió amablemente.

¡Muchísimas gracias D. Ramón, por hacernos vivir esta gran aventura en la estratosfera!